A pesar de lo que pensamos tradicionalmente, las adicciones son solo la punta del iceberg. Cuando se trabaja solamente sobre la conducta sin buscar su origen o su naturaleza más profunda, en el mejor de los casos se cambia una adicción por otra.

Todos conocemos a alguna persona que tiene cierta tendencia a caer en adicciones, o como mínimo, a contar con una personalidad obsesiva que les lleva a ejercer ciertos patrones de conducta sin control. Pero, ¿por qué hay personas a las que les ocurre y otras a las que no?

La respuesta es que existen ciertos rasgos de la personalidad propia que llevan a ser más propensos a cualquier tipo de adicción, ya sean drogas, alcohol, juego… De hecho, existe un elevado porcentaje de personas que no incluyen una única adicción, sino que siempre suelen convivir con dos o más de ellas. Estos rasgos suelen estar asociados a comportamientos como la impulsividad, la falta de autocontrol, impaciencia, baja tolerancia a la frustración y consecuentemente, baja autoestima.

Últimamente nos están llegando muchos casos de adictos a la cocaína o alcohol que gastan fortunas en un solo día en juegos, por lo tanto, también es adicto a las apuestas o juegos, una nueva tendencia al alza la de los juegos y apuestas online sobre todo en adolescentes.

La facilidad del acceso a través de dispositivos móviles a plataformas de apuestas online y juegos de apuestas hace que para usuarios de este tipo de personalidad adictiva resulte muy sencillo su uso. Por otro lado, las empresas de apuestas y juegos saben cómo incrementar el uso de sus aplicaciones con incentivos lo cual en ocasiones se vuelve muy adictivo y fomentan la ludopatía.

Todo ello, unido a la evasión que provocan determinadas adicciones, introducen al adicto en una espiral de la que cree que puede salir cuando quiera y sin embargo, no solamente no controla la situación, sino que la situación lo controla a él.

¿Qué indica que tienes una personalidad adictiva?

Algunas de las señales que indican que tienes una personalidad adictiva son las siguientes:

• Impulsividad: suele estar relacionada con la falta de estabilidad y la constante persecución de experiencias nuevas.
• Baja implicación o inexistencia de objetivos y metas: suelen ser ese tipo de personas que empiezan muchas actividades nuevas, pero no continúan en ninguna, ya que solo disponen de metas a corto plazo. Cuando surge el primer obstáculo, suelen abandonar fácilmente.
• Ansiedad y estrés: No disponen de mucha inteligencia emocional, lo que les lleva a encontrarse inestables tanto mental como emocionalmente con facilidad.
• Soledad y/o aislamiento social: No suelen tener facilidad para las relaciones sociales y cuando ellas se establecen, suelen alejarse ellos o el propio grupo.
• Cambios continuos en el estado de ánimo. Baja autoestima: Al no tener buenas habilidades de comunicación ni siquiera con ellos mismos, los cambios de conducta están a la orden del día. Les cuesta manejar sus propias emociones.

En el fondo, cualquier tipo de conducta de este tipo suele esconder una enorme inseguridad y miedo a fracasar.

¿Qué puedes hacer para evitar este tipo de conductas si eres una persona con tendencia adictiva?  Mantener la calma, sopesar las situaciones antes de actuar y trabajar tu autoestima para poder hacer frente a cualquier tipo de situación son las claves. En último término, si te ves incapaz de realizar todos estos cambios por ti mismo, es conveniente que pidas ayuda de profesionales.

Si usted o un ser querido están luchando contra la adicción a las drogas, alcohol, juegos o apuestas, puede ponerse en contacto con nuestro centro de desintoxicación en Sevilla y le atenderemos. Llama al 955 77 23 91 o envía un correo info@institutosocrates.es.